Mi bienvenida a los nuevos foreros y buenas tardes a todos.
Irrumpo aquí para contaros mi pequeña experiencia, especialmente para animar a los nuevos, sobre todo a los que se consideran mayores, por si sirve de algo y para si alguien me puede ayudar en algunas cuestiones que se me plantean.
Tengo ya 66 años y compré mi primera acción el 7 de julio de 2018, luego puedo hacer un balance de sólo un año, que es: estupendo. Hasta me ha dado una nueva razón para vivir. Miro mi cartera y me digo: ¿será posible que la haya hecho yo? Yo, que me querían explicar qué era el Ibex35 en el Banco y pedía que se callasen, que no lo entendía ni quería saberlo. Y todavía más: me divierto y entretengo. Que quién lo diría sólo hace un año.
Por ello envidio a los jóvenes porque tenéis una gran ocasión de solucionar vuestra vida -y la de muchos-, pues vale más empezar pronto que tarde aunque tengas algo de dinero. Pero igual merece la pena.
Yo ya estoy jubilada y, creo, aún habrá pensión para mí, pero para los jóvenes no. Por éso, si podéis, ahorrad algo. Porque yo, si me he metido en ésto es porque tenía un poco de dinero ahorrado y de una casa que vendí bien, y ya no había plazos fijos y no sabía como invertirlo. Un día oí de los bitcoins y me puse en Internet y así fui leyendo y enterandome de la libertad financiera y supe qué era el Buy and Hold, fondos pasivos y activos. Porque para mí tenía bastante, pero tengo un hijo que no puede trabajar y me preocupaba, aunque seguro en esta vida no hay nada, por supuesto.
Lo primero que leí en dos libros fue más bien sobre la gestión pasiva o fondos indexados por lo que metí parte del dinero asignado para invertir en buenos fondos de Vanguard y Pictet. Pero a los meses cayeron en mis manos los libros de Gregorio Hernández y fue un descubrimiento. Saqué el dinero de los fondos y empecé a comprar acciones. En dos meses compré todas las que tengo salvo dos, y alguna reposición en varias. Demasiado deprisa, pues conviene más poner menos dinero (1.000 en españolas y 2.000 en extranjeras por ejemplo está bien) y en un tiempo más espaciado. Hasta por razones matemáticas. Pero me parecía que no me iba a dar tiempo.
Estos días he estado poniendo al día mi cartera que os dejo para si sirve de inspiración o para las críticas.
Continúo en otro correo...
Irrumpo aquí para contaros mi pequeña experiencia, especialmente para animar a los nuevos, sobre todo a los que se consideran mayores, por si sirve de algo y para si alguien me puede ayudar en algunas cuestiones que se me plantean.
Tengo ya 66 años y compré mi primera acción el 7 de julio de 2018, luego puedo hacer un balance de sólo un año, que es: estupendo. Hasta me ha dado una nueva razón para vivir. Miro mi cartera y me digo: ¿será posible que la haya hecho yo? Yo, que me querían explicar qué era el Ibex35 en el Banco y pedía que se callasen, que no lo entendía ni quería saberlo. Y todavía más: me divierto y entretengo. Que quién lo diría sólo hace un año.
Por ello envidio a los jóvenes porque tenéis una gran ocasión de solucionar vuestra vida -y la de muchos-, pues vale más empezar pronto que tarde aunque tengas algo de dinero. Pero igual merece la pena.
Yo ya estoy jubilada y, creo, aún habrá pensión para mí, pero para los jóvenes no. Por éso, si podéis, ahorrad algo. Porque yo, si me he metido en ésto es porque tenía un poco de dinero ahorrado y de una casa que vendí bien, y ya no había plazos fijos y no sabía como invertirlo. Un día oí de los bitcoins y me puse en Internet y así fui leyendo y enterandome de la libertad financiera y supe qué era el Buy and Hold, fondos pasivos y activos. Porque para mí tenía bastante, pero tengo un hijo que no puede trabajar y me preocupaba, aunque seguro en esta vida no hay nada, por supuesto.
Lo primero que leí en dos libros fue más bien sobre la gestión pasiva o fondos indexados por lo que metí parte del dinero asignado para invertir en buenos fondos de Vanguard y Pictet. Pero a los meses cayeron en mis manos los libros de Gregorio Hernández y fue un descubrimiento. Saqué el dinero de los fondos y empecé a comprar acciones. En dos meses compré todas las que tengo salvo dos, y alguna reposición en varias. Demasiado deprisa, pues conviene más poner menos dinero (1.000 en españolas y 2.000 en extranjeras por ejemplo está bien) y en un tiempo más espaciado. Hasta por razones matemáticas. Pero me parecía que no me iba a dar tiempo.
Estos días he estado poniendo al día mi cartera que os dejo para si sirve de inspiración o para las críticas.
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